Cómo piensa el Pentágono cargarse Internet

Algunos dirán: ¿con un misil nuclear? Pues no, lo cierto es que así no. Aunque falta haría. Lo cierto es que corre por la red cierta información inquietante a cerca de un documento de seguridad estadounidense desclasificado en el año 2006. El documento en cuestión (aquí en su versión “original” -pdf-), es una descripción de objetivos y metodología a seguir en la guerra de información en Internet. Fue supuestamente realizado bajo la responsabilidad del entonces Secretario de Estado norteamericano Donald Rumsfeld. En él, se describe Internet como un enemigo que hay que temer, y controlar en su totalidad. Sea esto cierto o no, abre la puerta a una duda que ya existía. La red es un territorio de guerra de información y desinformación, donde el usuario común corre el peligro de convertirse en un peón de los intereses de otros y que conviene destruir.

El documento fue desclasificado debido a una petición realizada por la Universidad de Washington apoyándose en un Acta norteamericana llamada de Libertad de Información.

El documento era descrito en la web del Consejo de Asuntos Exteriores norteamericano como: “Documento del Pentágono fechado en el 2003 y previamente clasificado como noforn (a mantener secreto para extranjeros, aliados incluidos). Este informe detalla las operaciones militares estadounidenses de información, incluidas aquellas de guerra psicológica, guerra electrónica, e infiltración en las actividades periodísticas extranjeras.

-Infiltración y ataque a redes: "Cuando se hagan efectivas las recomendaciones hechas en este documento se conseguirá una rápida mejora en la capacidad de ataque a redes (Computer Networks Attacks)." "El mejoramiento de los conocimientos y aptitudes del combatiente (warfighter) en el campo de las operaciones de información (Information Operations) incluidas: …Una robusta y completa gama de aptitudes en el campo de la guerra electrónica y el ataque a redes de trabajo informáticas…"

-Clarificando intenciones: "Debemos combatir la Red. DoD (El Departamento de Defensa) está construyendo una fuerza central de la información. Las redes están aumentando la capacidad operacional del centro de gravedad, y el Departamento debe prepararse para combatir la Red." "La estrategia 'Defensa en Profundidad' debería operar con la premisa de que el Departamento combatirá la Red como si se tratase de un sistema de armas enemigo."

Algunos dicen que no hay más que leer la declaración de principios y objetivos del PNCA (Project for a New American Century) para ver que tal actitud, muy posiblemente, exista y esté bien desarrollada en las antesalas y los sótanos del poder. El desnudo objetivo de la voluntad de hegemonía mundial americana, en todos los campos, hace más que verosímil el planteamiento de estos objetivos: "Ahora es de conocimiento común que la información y las nuevas tecnologías (…) están creando una dinámica que podría amenazar la habilidad para ejercitar su poder militar dominante." "Control del espacio y del ciberespacio. Tanto como el control de alto mar, y la protección del comercio internacional, definieron los objetivos globales del poder en el pasado, así mismo lo serán los lugares internacionales comunes en el futuro. Una América incapaz de proteger sus intereses o los de sus aliados en el espacio o en la "infosfera" encontrará muy difícil mantener el liderazgo político mundial." "Aunque llevará varias décadas desarrollar el proceso de transformación, cuando esto ocurra, el arte de la guerra en el aire, tierra, y mar será completamente diferente de lo que es hoy, y el combate tendrá lugar en nuevas dimensiones: en el espacio, ‘cyberspacio’ y quizás el mundo de los microbios."

El virus de San Valentín

Millones de personas van a intercambiar correos electrónicos en todo el mundo para felicitarse el día de los enamorados pero, según el FBI, que sabe un huevo sobre éste y otros asuntos, muchos de esos e-mails no serán mensajes románticos sino peligrosos virus informáticos. "Si usted recibe inesperadamente una tarjeta electrónica de San Valentín, tenga cuidado", ha alertado el FBI en un comunicado. "Puede que no sea de un admirador secreto sino que contenga el virus Storm Worm".

Este virus informático infectó en enero del pasado año miles de ordenadores en Estados Unidos y Europa. Storm Worm se distribuía como un correo electrónico que en la línea de asunto informaba, falsamente, sobre una gran tormenta en Europa.

Según el productor de antivirus Trend Micro, este virus se está distribuyendo desde la semana pasada en forma de felicitaciones electrónicas por el Día de San Valentín.

Coincidiendo con estos datos, Google se descolgaba ayer martes con un estudio sobre el uso de correo electrónico que demuestra que este medio es cada vez más popular entre los jóvenes para expresar sentimientos y que algunos correos electrónicos pueden ser peores que un virus informático.

Internet se va a apagar

El Gobierno británico prepara un proyecto de ley que obligará a los proveedores de servicios de Internet a desconectar a quienes reincidan en la descarga ilegal de películas o música. Los clientes sospechosos de ese tipo de prácticas recibirán un aviso en cuanto sean sorprendidos por primera vez, serán suspendidos por algún tiempo a la segunda ocasión y, si vuelven a reincidir, se quedarán sin conexión.

Según señalan varios medios de comunicación británicos que han tenido acceso al borrador legislativo, las compañías de banda ancha que no cumplan serán perseguidas legalmente. Los nombres y otros detalles de los clientes infractores podrían ser comunicados a los tribunales, pero el Gobierno aún no ha decidido si los distintos proveedores de servicios de internet podrán compartir esos datos.

Alrededor de seis millones de usuarios de banda ancha se calcula que descargan ilegalmente archivos todos los años en el Reino Unido. Los cuatro mayores proveedores británicos de Internet –BT, Tiscali, Orange y Virgin Media– llevan seis meses negociando un sistema voluntario con las mayores productoras y distribuidoras de Hollywood. Desde hace dos años se llevan a cabo también negociaciones entre la industria musical del Reino Unido y proveedores individuales de Internet sin que se hayan registrado avances notables. Entre los puntos en discusión está el de quién se encargará de arbitrar cuando, por ejemplo, un cliente afirme haber sido víctima de la piratería de otro individuo que se ha aprovechado de su red inalámbrica para hacer sus propias descargas sin autorización. La decisión francesa de sancionar con la desconexión de internet al tercer acto de piratería ha aumentado en cualquier caso las presiones sobre el Gobierno británico para que adopte una legislación similar.

Informaciones insanas

El Gobierno chino ha detallado los positivos resultados de su campaña contra contenidos en internet y entre esos logros menciona la eliminación de más de 200 millones de informaciones en la red en el pasado año 2007.

Dentro de esa campaña, un total de 149 millones de publicaciones "no autorizadas", pornográficas o que no respetaron las leyes de copyright fueron confiscadas, según las cifras anuales que ha facilitado la Oficina Nacional contra Pornografía y Publicaciones Ilegales.

Así, se borraron, por ejemplo, 4.000 mensajes pornográficos, y la campaña se extendió también a juegos en línea, SMS a teléfonos móviles, periódicos y revistas (3,2 millones decomisados), CDs (3,36 millones) y otras publicaciones.

Algunas organizaciones internacionales, como Reporteros Sin Fronteras, argumentan que bajo esta campaña contra los contenidos "insanos" también hay persecución a sitios web políticos y críticos con el Gobierno chino. El bloqueo de la web de RSF y otras páginas críticas, así como de servidores de blogs y wikis (páginas cuyos contenidos que pueden ser modificados por los usuarios), dan razones para estas sospechas.

Ayer mismo se conocía que una de las blogueras más famosas de China, Zeng Jinyan, ha sido amenazada con ser detenida por "incitar a la subversión", cargo que ya se presentó como excusa para arrestar a su marido, el disidente Hu Jia, en diciembre pasado.

China, con 210 millones de usuarios de Internet (tantos como Estados Unidos), es uno de los países que ejerce mayor censura contra los contenidos de la Red. Este mes iba a entrar en vigor una normativa que iba a impedir la emisión en internet de vídeos por webs que no fueran estatales o autorizadas por el Estado, aunque las críticas que Pekín recibió por esta iniciativa llevaron a las autoridades a suavizar las condiciones de esta regulación.